Del mismo modo que somos muy exigentes con la calidad y seguridad cuando, por ejemplo, compramos un coche, también deberíamos prestar la misma atención al comprar una mampara de baño.
¿Exageramos?
Sigue leyendo, por favor.
Todos sabemos que cualquier producto se puede fabricar de muchas formas, y que dependiendo de éstas, el nivel de calidad final es uno u otro.
Antes de adquirir una mampara de baño deberías exigir que tenga la certificación que tienen las mamparas de baño de PROFILTEK: UNE EN 14428:2005. De este modo te aseguras de que la mampara cumple los siguientes requisitos:
1. Aptitud para la limpieza, ofreciendo una superficie libre de aristas, ángulos vivos, asperezas, bordes o rebabas. Además, el uso de los productos de limpieza habituales, aplicados como aconsejamos, no deben alterar el aspecto, reducir la seguridad o funcionalidad del producto.
2.
Resistencia al choque y propiedades de la fractura, lo que se consigue
utilizando vidrio de seguridad termoendurecido.
3. Durabilidad que determina:
Resistencia a la corrosión de todos los componentes.
Resistencia a productos químicos y manchas.
Resistencia a los ciclos de humedad y secado.
Endurancia, que significa que la puerta de la mampara se somete a un ensayo de 20.000 ciclos de aperturas y cierres comprobándose que la puerta o la hoja no presenta pérdidas en su funcionamiento.
Estabilidad frente a los impactos.
Estanquedidad.
4. No utilización de sustancias peligrosas.
5. Marcado CE y etiquetado.
6. Sistema de control de producción en fábrica para garantizar el cumplimiento de todas las normas expuestas
¿Te hace reflexionar un poco? Imagínate que tras un resbalón en la ducha, con el consiguiente impacto contra la mampara, ésta se rompiera… lo sabemos, prefieres no imaginártelo.
Pues cuando vayas a elegir tu mampara de baño hazlo de modo que si tú o cualquier miembro de tu familia se resbala en la ducha, la mampara no agrave el problema. No te la juegues. Puedes confiar en nosotros.